Muchas mujeres se someten cada año a una operación de reduccion de pecho por diferentes motivos, aunque hay dos principales: preferencias estéticas y dolor de espalda. Los senos de gran tamaño suelen suponer grandes molestias en la espalda, ya que pesan bastante. Es por ello por lo que a partir de ciertas tallas se recomienda realizar una mamoplastia reductiva.
Además, debido a ese mismo peso, es probable que las mamas se acaben cayendo, por lo que la reducción se combina con una elevacion de pecho o mastopexia.
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